TODO EL DINERO DEL MUNDO
Vino la Reina y dijo:
-Se te acaba de cumplir un deseo. -¿A mí? -dijiste vos. -Si, a vos: a partir de ahora sos dueño de TODO EL DINERO DEL MUNDO. ¿No era eso lo que querías?
Los ojitos te brillaron como monedas, hiciste una sonrisa de cara de prócer de billete y dijiste: -Bueno.
Y ahi lo viste, tuyo, TODO EL DINERO DEL MUNDO.
Precio: $32